En NHLmania os hemos hablado de la trilogía de películas de El Castañazo (Slap Shot) donde parte del “éxito” proviene de los hermanos Hanson, tres pintorescos tipos duro que usan el juego brusco en el hielo para lograr victorias. Dichos personajes están basados en los hermanos Carlson, tres jugadores de hockey de una misma familia que tenía una misma pasión: El hockey sobre hielo. Jeff, Steve y Jack, estos son los nombres reales en los que se basaron para las películas. Jeff y Steve participaron en todas las películas pero Jack no pudo estar en ninguna de las entregas. Jack fue sustituido por David Hanson que también era jugador de hockey.
Nacidos en Virginia (Minnesota), coincidieron por primera vez sobre el hielo en los Marquette Iron Rangers, un equipo semi profesional a mediados de los sesenta y setenta de Michigan. Cada ‘hermano’ tuvo su propia andadura en el mundo del hockey. Jack comenzó su carrera en la WHA con los Minnesota Fighting Saints, Edmonton Oilers y los New England Whalers, para acabar en la NHL jugando para los Minnesota North Stars (actuales Dallas Stars) y los St. Louis Blues. Con Jack en la WHA coincidió su hermanos Steve, que vistió los mismos colores de los tres equipos donde Jack jugó. Steve dio el salto a la NHL con Los Ángeles Kings. Por su parte, Jeff fue el que menos carrera hizo en el mundo del hockey sin llegar a jugar en la NHL y dando saltos en equipos de ligas menores.
A Dave Hanson se le podría considerar el ‘hermano adoptivo’ de los Carlson puesto que fue el que sustituyó a Jack.
Curiosamente Dave era un jugador agresivo al que le apodaban The Killer. También jugó en la WHA con los New England Whalers, Minnesota Fighting Saints y los Birmingham Bulls mientras que en la NHL vistió los colores de los North Stars y Detroit Red Wings.
Una vez retirados del hielo y con el éxito de sus personajes, los hermanos Carlson se han dedicado ” a vivir” de sus personajes ficticios, sobre todo acudiendo a cientos de eventos durante el año en ligas menores. La bases del éxito de los hermanos fuera del hielo es que han sabido aprovechar la historia de sus personajes y para los que habéis visto la primera entrega (las más exitosa) el momento de los coches de juguetes es real aunque algo exagerado.
Saben de sobra que son un icono en la historia del hockey, incluso con detractores de por medio; “No necesitamos esas cosas. Solo somos nosotros mismos y te gustamos, o no. Intentamos hacer felices a todos, pero no puedes complacer a todos” opinaba Steve en una entrevista para la NHL por el 40 aniversario de la película.
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