Los fans al hockey tienen un lado sentimental hacia el pasado muy agudo, siempre buscando referencias con las que comparar los tiempos actuales, sean equipos o jugadores e incluso el estado general del juego.
Pero todas las comparativas acaban en un mismo lugar o periodo de tiempo: en el mítico Old Time Hockey. ¿Pero que años o décadas abarca dicha expresión? És difícil de decir, al girar la vista atrás unos cuatro o cinco lustros normalmente ya da la sensación de cambio de ciclo en el juego, de esta forma en los años 80 el Old Time Hockey se establecía en el imaginario colectivo en la década de los 60 mientras que en la actualidad se ve desde el 1995 hacía abajo.
Es de recibo no imaginarse/confundir el Old Time Hockey en un ‘todo igual’ en cuanto aspectos del juego dado que con un periodo de tiempo tan longevo el hockey ha evolucionado de forma constante. Aún así, el mencionado espacio de tiempo tiene un patrón en común, la dureza y/o violencia en que se desempeñaba el juego a diferencia de hoy en día.
Más dureza, violencia, anotación,…
Con mirar un poco las hemerotecas de los décadas pasadas (siglo XX) uno ya se puede dar cuenta con el ‘empeño’ en que se jugaba al hockey, las peleas (muchas) y tanganas eran habituales durante los partidos de la NHL, pero el Old Time Hockey (o hockey de antaño en español) no solamente se nutre de la violencia de la época en el hielo, también forman parte de este imaginario colectivo las grandes estrellas clásicas, equipos míticos, pabellones legendarios ya derruidos, anotaciones altísimas, porteros (no todos) sin tanta habilidad como hoy en día, guardametas a cara descubierta, dentaduras diezmadas, cicatrices, celebraciones espectaculares, peleas con los dos equipos al completo en el hielo, muchos enforcers en las plantillas, franquicias desaparecidas,…un largo etcétera de situaciones que ayudan a entender mejor lo que significa la expresión Old Time Hockey.
No cabe duda que muchas veces se tira de sentimentalismo al referirse a ello, sobre todo entre los más puristas, porqué no todo lo antes enumerado hacía mejor el hockey, pero si diferente, junto con ese toque clásico que raspa la memoria (muchas veces viciada dejando de lado los aspectos negativos) para reconfortar al aficionado.
Los más jóvenes fans a la NHL y el hockey en general, ávidos y deseosos de información relacionada con su pasión, acaban llegando siempre al ‘pasado’ y es allí donde el Old Time Hockey retruena de nuevo en la cabeza de la gente para convertirse en una expresión mítica y legendaria más allá de si todo lo que representa de verdad es mejor que lo actual. Una frase de fortuna que sin ninguna duda perdurara hasta el fin de los tiempos y que la película Slapshot recreó con mucha fidelidad visto a través de una mirada del siglo XXI.